Lisboa, Sintra, Ericeira…
Lo prometido es deuda. Ya estamos de nuevo por Madrid y poniendo al día el blog. Como sabréis, si habéis seguido nuestra página de Facebook, hemos pasado unos días en Extremadura y en Portugal. Horas de carretera para aprovechar la primera mitad de nuestras vacaciones de verano. Paramos en Fregenal de la Sierra (con la familia de Alicia), en Lisboa, Sintra y Ericeira, siempre con la esperada pero molesta compañía de la ola de calor. Eso sí, descubriendo algunos rincones que queremos compartir con vosotros…
Lisboa es una ciudad preciosa, aunque mal hecha: ¡No hay ni una sola calle en plano!. Todo son cuestas y a 40 grados de temperatura teníamos que pasar unas cuantas horas en el ‘hostel’, que se convirtió en nuestra casa durante estos días. Por norma general, los albergues suelen ser sitios económicos en los que esperas ir sólo para dormir unas horas y coger fuerzas para otra jornada de turismo. Los hay realmente turbios, como ÉSTOS que os enseñamos en el blog, pero Lisb’on Hostel es una excepción.
Podríamos escribir párrafos y párrafos sobre la ciudad y sus encantos, pero en este blog nos toca centrarnos en las que han sido nuestras segundas casas durante el viaje a Portugal. Por 17 euros (persona y día) nos alojamos en este genial complejo situado entre la zona de marcha de Barrio Alto, el barrio de Chiado y el paseo ‘portuario’ junto al río Tajo. Necesitábamos una opción barata y ésta fue la mejor recomendación, que ahora nos vemos obligados a compartir también con vosotros.
En nuestro caso, optamos por una habitación compartida, con sus múltiples desventajas, pero la verdad es que el albergue nos cautivó. Una cocina completísima y muy limpia; un comedor amplio y luminoso; una sala de estar con juegos de mesa, sofás y hasta ordenadores Mac para conectarse a Internet; una terraza-mirador desde donde ver atardecer; y un jardín con tumbona para hacer un buena barbacoa y tomar unas cervezas por la noche. Basta con ver las fotos para darse cuenta de que allí cuidan cada detalle.
Tras unos días geniales subiendo y bajando cuestas por Lisboa, con su correspondiente parada en Belém para llevarnos a la boca uno de los mejores dulces que hemos probado, nos pusimos de nuevo en marcha para pasar un día en el Palacio Da Pena, en Sintra. Un rincón mágico y lleno de color, donde aprovechamos para sacar muchas fotografías, al tiempo que buscábamos alguna sombra desde donde dibujar las increíbles murallas del castillo. Una experiencia muy artística, pero agotadora.
De esta forma, para acabar el viaje, nos decidimos por un lugar de playa, ya que, entre unas cosas y otras, aún no habíamos disfrutado al 100% de ese merecido descanso del que hablábamos antes de salir de Madrid. Como viajábamos sobre la marcha, reservamos este último alojamiento prácticamente a ciegas: el Lone Surfer Hostel. Bien ubicado y con aparcamiento gratis, pero sin excesos. Un sitio, como decíamos al principio, para dormir. Y así hicimos… unos días de playa, sol y marisco. En definitiva, un final perfecto para el viaje.
Sobre el autor
Home Sapiens Alicia y Sergio. Diseñadora gráfica y periodista. Dos amantes de los viajes que han dejado todo durante un año para recorrer el mundo y contar sus aventuras en este blog.
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Genial el sitio, me apunto el albergue, quien sabe si necesitamos uno cuando vayamos por allí. Gracias.
Yo soy más de Oporto, que de Lisboa, pero a ambos sitios quiero volver . Me apunto el albergue, casi siempre viajo sóla y he encontrado de todo, asi que mejor tirar de recomendaciones e ir a lo seguro, ya os hablare de mi albergue en Lisboa, una casa de locos ja,ja,ja.
Abrazos