Cómo organizar una buena fiesta en casa
Las fiestas son mejores… cuando no son en tu casa. Esa es una norma básica que debéis conocer. Pero hay veces que no te queda más remedio que organizar el ‘guateque’ y, por ello, hemos preparado una serie de consejos ilustrados que os pueden ayudar. Las fiestas están muy presentes en la vida de los jóvenes emancipados y un blog como éste no lo puede pasar por alto.
Muchos recordaréis cómo inauguramos nuestro piso. Fue ‘La semana por la Independencia’ y tenemos que reconocer que nos excedimos (los siete días). Nuestros pobres vecinos nos tuvieron que sufrir, pero ya nos disculpamos y, a partir de entonces, hemos sido muy respetuosos. Lo cierto es que aprendimos de aquella experiencia y lo vamos a compartir con vosotros.
Las fiestas entre semana no están bien vistas. A tu vecino no le va a hacer ninguna gracia que trates de explicarle lo que es un ‘juernes’. Cíñete a lo que aún está socialmente aceptado: viernes y sábados. En cuanto al horario, conviene empezar sobre las 20.00 horas, para que los más malquedas lleguen a la hora de cenar y a las 2.00 de la madrugada podáis ir saliendo a algún garito cercano para seguir con la noche de fiesta.
No os compliquéis demasiado con el tema de la comida. Hay gente muy detallista que se preocupa por adornar la mesa con todo lujo de detalles, pero tened en cuenta que, aunque en un principio os reconozcan el esfuerzo, a la tercera copa les dará igual comerse una espectacular tortilla o unas patatas fritas de bolsa. Nuestro consejo es que optéis por cosas baratas, que la crisis nos pasa factura a todos.
Por eso mismo, conviene que cada cual lleve su propia botella de alcohol. Además, hoy la gente no se conforma con un buen cubata, de ron de los de toda la vida… así que lo mejor que podéis hacer es dejarles a ellos que se encarguen de sus caprichos.
Lo que sí os compete directamente es el mobiliario y la cubertería. En este punto tenemos varias recomendaciones importantes. Primero, quita todo lo que se pueda romper. Lo ideal es contar con sillas plegables y mesas que se puedan desplazar con facilidad. De esta forma, en medio de la noche, no os costará nada conseguir un espacio diáfano donde montar algún juego, ya sea de cartas, dados o el mítico ‘Escandinavo Abstemio’. ¿Hay alguien que todavía no lo haya probado?.
Respecto a los platos y los cubiertos, no os compliquéis y compradlos de plástico. Son baratos y os sacan de un apuro. Sin embargo, somos rabiosos opositores a los inestables vasos de plástico. Como se suele decir, en este caso, ‘es peor el remedio que la enfermedad’ o, lo que es lo mismo, preferimos que se nos rompa un vaso de cristal en el suelo a que se nos caigan veinte vasos de plásticos llenos de bebida.
Por otra parte, es fundamental tener una serie de ‘áreas restringidas’ en casa. Ya sea el segundo baño o vuestro cuarto. No sólo porque a alguien se le ocurra hacer cosas indecentes en estas estancias, sino porque os ayudará a acotar la zona de limpieza para la mañana siguiente. Esta última tarea es, sin duda, la peor. Por ello, no olvidéis de ir metiendo en una bolsa grande de basura las cosas más grandes para que vuestros invitados se deshagan de ella una vez que acabe la fiesta.
Finalmente, dejad que el más borracho pase la noche en vuestra casa. Él no lo sabe, pero se convertirá en mano de obra barata para la jornada de limpieza que os espera la mañana siguiente.
Sobre el autor
Home Sapiens Alicia y Sergio. Diseñadora gráfica y periodista. Dos amantes de los viajes que han dejado todo durante un año para recorrer el mundo y contar sus aventuras en este blog.
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